La iglesia de Prissac era la de un priorato de la abadía benedictina de Saint-Savin (departamento de Vienne). Está dedicada a San Martín, obispo de Tours, quien evangelizó el centro y el oeste de Galia en el siglo IV.
Es la parte más antigua: fue construido a finales del siglo XII y constituye el porche de entrada a la iglesia.
El arco mitral del portal descansa en cuatro columnitas rematadas por pequeños capiteles con motivos vegetales. En los capiteles de la derecha, se distinguen nítidamente unas florecitas, pero
también rostros.
Se llega después bajo un porche cuadrado, con bóveda de arista.
Unas grandes bandas oscuras ocupan las partes superiores de los muros. Son colgaduras de luto. Las pintaban en cada defunción ocurrida en la familia señorial. De hecho, se vislumbran los vestigios amarillos de los blasones de la familia de la Trimouille, señores de Fontmorand en Prissac.
La bóveda está ornamentada con pinturas antiguas de motivos vegetales y está horadada en su cúspide para dejar paso a las cuerdas que movían las campanas. Dos campanas datan de 1913 pero la tercera se remonta a 1555 y es contemporánea del resto del edificio. Al llamarse Marie [María], su dedicatoria invita a aplacar la cólera divina y a alejar rayos y tempestad.
Un segundo portal, de estilo románico, permite pasar a la nave. Es sin duda anterior al portal principal y, en 2014, quedó desembarazado de los bastos ornamentos de escayola que lo cubrían. Algunas piedras enrojecidas recuerdan que el edificio fue sin duda víctima de un incendio. Este portal perdió sus columnitas.
Al principio, el edificio solo contaba con una nave, más estrecha y abovedada de medio punto. El muro de la izquierda sin duda es el más antiguo, como atestigua en el ángulo una cabeza monstruosa de ojos exorbitados, nariz cortante y orejas puntiagudas dispuestas casi en lo alto del cráneo. Por la parte de fuera, este muro es el único que presenta algunos modillones de estilo románico que se pueden ver al colocarse uno frente a la panadería.
A finales del siglo XV, los señores de la Rochechevreux y los habitantes de Prissac añadieron tres capillas a la derecha de la nave principal. Pero estas construcciones fragilizaron la vieja iglesia y se derrumbó un muro. A principios del siglo XVI, se reunieron bajo un mismo techo la vieja iglesia y las capillas, lo que hoy día puede dar a creer que se trata de dos naves adosadas. Se componen de cuatro tramos cuadrados, separados el uno del otro por tres columnas, siendo acanalada la columna más cercana al coro. En cambio, las otras dos son simples cilindros de piedra. El estilo desarrollado es el gótico flamígero.
Dos familias ejercían su influencia en el edificio. Así, la nave principal estaba rodeada de una colgadura de luto con el escudo de armas de los señores de Fontmorand mientras la nave secundaria (a la derecha) lo estaba con el de los Couraud de la Rochechevreux.
En la nave, las estatuas de san José y de una Virgen con el niño encuadran una copia del cuadro de la Visitación de Sebastiano del Piombo.
Las pinturas que ornan las bóvedas probablemente sean de finales del siglo XIX pero restituyen casi exactamente la decoración pintada en el siglo XVI, a la que tapan.
Diferentes plantas están dispuestas en ramilletes. Se reconocen flores campestres: hojas de yedra, de fresa, de roble y gramíneas. Los tonos son suaves: ocre amarillo, ocre pardo, blanco, negro, azul... Para cada nave, una bóveda decorada con vegetales alterna con una bóveda ornamentada con falsas piedras labradas.
Se entra en esta capilla de finales del siglo XV pasando por debajo de un arco de medio punto polícromo. Pertenecía a los Fontmorand, señores de la Trimouille. Una bóveda de arista descansa en dos cabezas de personajes en el lado este. Está ornamentada con numerosas pinturas de finales del siglo XV :
Dios con los atributos del Papa, San Marcos, San Mateo y san Juan, San Lucas
Las caras fueron objeto de vandalismo en el siglo XVI cuando las guerras de religión.
Doble colgadura de luto :
Esas bandas oscuras se vuelven a pintar en la iglesia con ocasión de la muerte del señor. Esta colgadura de luto lleva el escudo de armas de la familia de los La Trimouille, señores de
Fontmorand, en cuya capilla funeraria nos hallamos. Corría por todo el muro norte de la nave principal. Finales del siglo XV
“Los tres vivos” :
Esta escena evoca el Dicho de los tres muertos y los tres vivos. Tres muertos, que salen de sus tumbas, interpelan a tres jóvenes y joviales cazadores, para recordarles lo breve de la vida. Aquí,
solo quedan los jóvenes cazadores; los tres muertos debían de encontrarse en el muro degradado, a la izquierda de la puerta. El primer noble, asustado por semejante espectáculo, vuelve la cabeza
hacia atrás y suelta un halcón, a punto de lanzarse sobre un conejo. Lo siguen otros dos caballeros, con una pluma grande de adorno en sus tocados. Los acompañan dos perros que persiguen al
conejo. Podemos notar que el tercer caballero se dispone a orar. Finales del siglo XV.
Misa de san Gregorio :
El Papa Gregorio el Grande está orando al pie de un altar. Lo asiste un clérigo que lleva un cirio. Detrás del altar, aparecen Cristo y los instrumentos de la Pasión. Finales del siglo XV.
San Jacobo (¿?) y santa Catalina de Alejandría :
El personaje de la izquierda, con un bordón, está blandiendo un libro (que hoy en día casi ha desaparecido) en su mano izquierda; podría tratarse de san Jacobo. Lo acompaña santa Catalina de
Alejandría. Esta princesa coronada se identifica perfectamente gracias a la rueda rota y a la espada, utilizadas ambas durante su martirio. Finales del siglo XV.
El fondo del coro – lo que llamamos la cabecera – es plano, como en muchas iglesias de la región. El ajimez que le da luz es de estilo flamígero. Un Cristo en la cruz del siglo XVII, muy realista, ocupa el muro norte.
El altar mayor está ornamentado con un bajorrelieve que representa a los cuatro evangelistas rodeando a Cristo. Se reconocen por el símbolo que hay a los pies de cada uno. A la izquierda están san Marcos y san Mateo. A la derecha, se encuentran un personaje imberbe, san Juan y san Lucas.
Las pinturas que adornan el muro sufrieron daños cuando se abrió esta gran ventana.
¿San Martín? :
Este obispo con barbas está representado con su cruz y su mitra. Se trata probablemente de san Martín, al que la iglesia fue dedicada. Finales del siglo XV - principios del XVI.
Sin embargo, aún se perciben vestigios de los apóstoles colocados alrededor del coro (aunque solo cuatro se adivinan todavía). Cada uno posaba la mano derecha en una cruz de consagración (una cruz inscrita en un círculo), una representación muy excepcional en Francia.
Personaje orando :
Este pequeño personaje parece estar orando delante de una gran figura que está blandiendo una cruz. Esta escena quedó muy dañada cuando se abrió o se amplió la ventana. Así, lo que se asemeja a
una especie de ala tambien podría ser un ropaje. Finales del siglo XV - principios del XVI.
El segundo altar, llamado del Santísimo Sacramento, está ornamentado con una escena que evoca la coronación de la Virgen. Lo corona una hornacina con una Virgen con el niño del siglo XVIII,
venerada desde hace mucho tiempo en Prissac; la solían llevar en procesión el 15 de agosto.
En este mismo muro, al quitar un tapiz en 2006, apareció otra hornacina de piedra esculpida de estilo gótico con fragmentos de policromía antigua.
Finalmente, las restauraciones de 2013 permitieron sacar a la luz nuevas pinturas.
Martirio de san Sebastián :
El santo, atado a una columna, está cubierto de flechas lanzadas por arqueros situados a ambas partes. Los trajes de los cuatro arqueros permiten datar la escena de finales del siglo XV -
principios del XVI.
A san Sebastián se le invoca para protegerse contra la peste.
San Andrés :
Este apóstol se reconoce por sus pies desnudos y su cruz en X, símbolo de su martirio. En la mano derecha lleva una cruz de consagración. Sin duda pertenecía a un conjunto de doce apóstoles, con
sendas cruces de consagración y colocados alrededor del coro. Finales del siglo XV - principios del XVI.
En esta segunda nave, camino de vuelta hacia la entrada, se pueden ver vidrieras ejecutadas por Charles Lévêque de Beauvais a finales del siglo XIX. Estas ventanas fueron retocadas a lo largo de
las edades mientras otras, que daban luz al muro norte, se taparon.
Una primera vidriera representa la Adoración de los pastores y un Interior de Nazaret. El registro inferior del muro permite vislumbrar una nueva pintura (véase más adelante el
comentario de las pinturas).
San Juan :
Este apóstol se reconoce por sus pies desnudos y el cáliz que lleva en la mano izquierda. Su mano derecha descansa en una cruz de consagración. Sin duda pertenecía a un conjunto de doce apóstoles
con sendas cruces de consagración y colocados alrededor del coro. Finales del siglo XV- principios del XVI.
La siguiente vidriera representa al rey san Luis llevando la corona de espinas por la que mandó construir la Santa Capilla en París. Debajo de sus pies aparece el escudo de armas de la familia de Lanet que financió la vidriera. A la derecha de su cabeza, se reconoce el castillo de la Garde-Giron, perteneciente a esta familia.
Finalmente, una última vidriera representa a María al pie de la cruz y la Asunción de la Virgen.
El muro oeste está adornado con pinturas de mediados del siglo XVI.
Virgen con el niño, posando la mano izquierda en una cruz de consagración :
Los rostros de la Virgen y del niño Jesús fueron amartillados. Quizá fuera un acto de vandalismo relacionado con las guerras de religión (sitio de Bélâbre por los calvinistas en 1587).
Encima de la escena, se encuentra una filacteria poco legible y dañada: “ascendit ad celo sedet ad dextram patris omnipotentis” (sube al cielo y siéntate a la diestra del padre
omnipotente).
Santa Catalina de Alejandría :
pisoteando al emperador Maximino, en el origen de su martirio
Lleva un trozo de la rueda destinada a su suplicio. La filacteria “Sancta Katherina” confirma la identidad del personaje.
Personaje orando (quizá el comanditario de la obra)
Filacteria: “sancte andre ora pro nobis” (san Andrés, rece por nosotros)
Martirio de san Andrés :
Cuatro verdugos atan los miembros del santo en una cruz en “X”. El verdugo de arriba, a la izquierda, tira con todas sus fuerzas en las ataduras, apoyándose en el torso del mártir. La ropa de los
personajes (calzas ahuecadas, gorgueras...) permiten datar esta pintura de mediados del siglo XVI.
Sin embargo, entre el pilar y la puerta de entrada, se adivina a san Cristóbal llevando al niño Jesús. Esta pintura del siglo XIV es la más antigua de la iglesia y se conservó gracias a que fuera fijada en el muro del campanario (véase más adelante el comentario de las pinturas).
Dios Padre en majestad y fragmento de águila :
El Padre es representado con la tiara papal. Bendice con la mano derecha y sin duda sujeta un globo (símbolo de universalismo) en la mano izquierda. Estaría probablemente rodeado por el
tetramorfos (los cuatro evangelistas representados por sus símbolos) del cual solo queda el águila de san Juan situado a izquierda de la escena. Siglo XVI.
Traducción : Marie Salgues